Instalar un grupo electrógeno como alternativa a la red eléctrica tiene cada vez más adeptos. Hoy en día, con los altos precios de la electricidad y mucha volatilidad de precios, cobra más sentido la instalación de un generador eléctrico en detrimento del suministro de la red eléctrica.
Motivos para instalar un grupo electrógeno en lugar de la conexión a red eléctrica
La motivación para cambiar la instalación y poner un grupo electrógeno, para desengancharnos de la red o para disminuir la potencia, está motivada por el ahorro en costes. Con un grupo electrógeno solamente gastamos cuando estamos produciendo, cuando estamos consumiendo electricidad. En muchas ocasiones tenemos contratada una potencia que solo se utiliza unos momentos en la jornada o, incluso, unos días al año; pero pagamos todo el año por disponer de esa potencia. Por contrario, con un grupo electrógeno solamente pagaremos cuando estemos produciendo esa electricidad, mientras que si el grupo está parado, no incurrimos en coste. Esta decisión se toma de forma habitual en granjas, explotaciones agrícolas de frutas que usan cámaras frigoríficas en algún mes del año, en bodegas de vino, talleres y fábricas con picos de consumo por maquinarias grandes; y también en segundas residencias.
¿Qué es lo más habitual?
La opción que más acogida tiene entre los clientes que optan por esta opción, es rebajar la potencia contratada hasta un mínimo de su gasto habitual (gastos de luces de oficina, o pequeña maquinaria), para utilizar el grupo electrógeno cuando se pone en marcha cierta maquinaria, o cuando se inicia la actividad productiva en una época determinada del año. Es por ello que instalar un grupo electrógeno como alternativa a la red eléctrica cobra sentido.
Esta decisión requiere de estudio y asesoramiento. En JF Generadores estamos a tu disposición para explicarte los pros y contras de esta alternativa para tratar de contener el coste. Llámanos e infórmate sin compromiso.